La <strong>selección española de fútbol </strong>logró el pasado 20 de agosto un hito para la historia al conquistar <strong>el Mundial que se disputó en Australia y Nueva Zelanda</strong>. El tanto de <strong>Olga Carmona</strong>, el gol de nuestras vidas, sirvió para <strong>doblegar a Inglaterra en la final</strong>, alzar al cielo de Sidney el trofeo más preciado de todos y bordar en el escudo la primera estrella de campeonas del mundo. Sí, campeonas del mundo, <strong>pues después de todo lo sucedido parece haber quedado en un segundo plano y es algo destacable y motivo de orgullo</strong>.