Un futbolista de 17 años se cayó desplomado en el terreno de juego después de recibir «una brutal agresión» sin que estuviera el balón en juego. Una acción donde el rival no paró de mofarse, como reconocen desde el club de San Vicente del Raspeig (Alicante) y por la que ya han tomado medidas al respecto. El jugador ya está en casa recuperándose del incidente, pero acusa una «contusión fuerte cervical» que le impide incorporarse debido a las náuseas y mareos que le siguen produciendo el golpe que recibió.
