El <strong>Real Madrid </strong>llega a la vuelta de las semifinales de la <strong>Champions</strong> con un resultado adverso pero con la confianza por las nubes. Por un lado, porque ya ha ganado la Liga y lo ha hecho con casi todos sus jugadores enchufados. La consecuencia es que será sin duda <strong>una de las elecciones más complicadas para el entrenador italiano,</strong> consciente de que va a tener que dejar en el banquillo a jugadores en gran estado de forma y que merecen un sitio en el partido <strong>por un puesto en la final de París.</strong>
