<strong>Villablino</strong>, pueblo situado en pleno corazón de la Reserva de la Biosfera Valle de Laciana, entre montañas usadas tradicionalmente por los ‘vaqueiros’ cuando en los meses de verano suben con el ganado a pastar, <strong>recibió con entusiasmo al pelotón de LaVuelta</strong>, que afrontaba una jornada ideal para la fuga <strong>después de la batalla entre favoritos</strong> en Ancares.