<strong>Max Vertappen no parece muy involucrado en la nueva F1,</strong> que pretende ser una fiesta interminable alrededor de la carrera del domingo, en un escenario tan inusual como el de<strong> Las Vegas.</strong> El holandés ha mostrado su lado más crítico, a la hora de evaluar la nueva experiencia, quizá al estilo de Miami, pero multiplicada por diez, en cuanto a lo accesorio por encima de lo deportivo