Ni un fallo. Cuatro triples anotados de cuatro intentos, la única canasta de dos puntos que probó. 14 puntos, seis rebotes, una asistencia. Y sobre todo, una ovación interminable del WiZink Center. Rudy Fernández fue el protagonista sin discusión en la victoria del Real Madrid ante el UCAM Murcia por 79-63, triunfo que deja a los blancos a un paso del título de la ACB y con la opción de certificarlo este miércoles ya en la ciudad murciana. Sería el broche de oro para Rudy, que este lunes pudo haber jugado su último partido con la camiseta blanca en el Palacio de los Deportes, antes de encarar el reto de disputar sus sextos Juegos y de retirarse después de este verano. “Puede ser mi último partido aquí. Hay muchas emociones. Me voy con el sabor de haberlo hecho todo por este equipo. El reconocimiento ha sido increíble y me lo llevo conmigo. Son muchos años, muchas batallas juntos, muchos títulos, también derrotas. Tomé la mejor decisión al venir aquí. Me llevo esto para toda la vida”, afirmó el héroe del encuentro.