<strong>Gündogan </strong>no ha tardado ni una semana en finiquitar su contrato con el <strong>Barça </strong>para volver a poner rumbo al <strong>City</strong>. Bromas justas con el capitán de Alemania, que <strong>llevaba tiempo decepcionado con lo que se había encontrado en el Barcelona </strong>y que no ha admitido presiones y tampoco ha querido formar parte de un <strong>culebrón </strong>sobre su futuro y su salario. En cuanto el equipo de <strong>Laporta </strong>le sugirió que su ficha podía ser un problema, cogió la puerta y se fue. Hablamos de un futbolista con mayúsculas, alejado de la parafernalia del fútbol actual y más lejos aún del show que rodea al Barça. Una especie de <strong>Toni Kroos</strong>. Se vuelve al City, de donde se arrepintió de salir al poco tiempo.