No es algo nuevo, pero en cada ventana de partidos de selecciones y más cuando aparecen lesiones,<strong> el clamor en contra de los citados partidos crece y se multiplica</strong>. Desde la FIFA hablan de calendario consensuado por las diferentes confederaciones que, a su vez, <strong>pactan o discuten con clubes y otros organismos</strong>, pero lo cierto es que la situación no parece tener esa solución de la que se habla y que apunta a una reducción de partidos. En el fondo se habla, pero al final nadie la quiere tal y como demuestra <strong>el calendario ya aprobado hasta 2030.</strong>