Uno de los tres árbitros que dirigieron la final de la pasada Euroliga en Berlín, <strong>Belosevic (los otros dos fueron Rocha y Difallah), y que perdió el Real Madrid ante el Panathinaikos</strong>, lo hizo llevando una cámara personal en el pecho. <strong>Es algo que la Euroliga ya ha realizado en varias ocasiones y se ve el partido</strong> desde el punto de vista de uno de sus mayores protagonistas. También se escuchan conversaciones.