Con el paso de las horas, <strong>y el frío análisis de Fernando Alonso sobre su propia y surreal sanción</strong>, crece el número de pilotos, por no decir de fans, que no entienden la sanción al piloto español tras el accidente de George Russell en la última vuelta del Gran Premio de Australia. Sancionar con 20 segundos (con 10 no perdía puestos…) y <strong>no admitir un cambio de trazada, mínimo, en una curva, sienta ya un precedente peligroso en que no se contempla el error, ni el desgaste de gomas ni hacer dos vueltas distintas… </strong>pueden llover las denuncias a los comisarios en cada carrera, porque al final no pilotan robots.<strong> «Como ex piloto, no puedo estar más en desacuerdo», dijo De la Rosa.</strong>